lunes, 9 de mayo de 2011

La batalla del Este

Es un tipo afable, sencillo y llano. Confiesa estar un poco cansado del tute que conlleva una campaña electoral, sobre todo, “porque es imposible desconectar”.
A menos de dos semanas de las municipales que decidirán el nuevo alcalde de Sevilla, el candidato del PSOE, Juan Espadas, está convencido de poder recortar al PP el terreno que le otorgan las encuestas y la reciente del CIS, que le quita la mayoría absoluta que parecía definitiva, le aporta un plus de confianza.
Además de los constantes llamamientos a la participación el próximo día 22, repite insistentemente otra idea en dos palabras: “proyecto nuevo”, expresión que delimita a las claras su situación de, por una parte no comulgar con lo hecho por Monteseirín y, por la otra, deberse al partido, el mismo que el del actual alcalde.
La batalla electoral está llegando a su fin, pero el campo principal sigue siendo el que ya se apuntaba a primeros de año: los barrios del Este de la ciudad, esos a cuya representación socialista plantó cara cuando hizo las listas y esos en los que centrará sus esfuerzos, sólo o en compañía, en la recta final.

Sobre Monteseirín y Zoido

 ¿Se ha sentido incómodo con Monteseirín en el Ayuntamiento?
No. Lo primero es el gobierno de la ciudad y los problemas de los ciudadanos. Yo he buscado hueco para hablar de futuro. Además lo contrario es irreal: un ciudadano prefiere saber cual es la solución del Ayuntamiento a su problema de hoy que cuáles son los proyectos de futuro. Ahora esa situación se ha invertido, pero de manera natural
¿Qué opinión tiene de Zoido?
No lo conozco. Hemos hablado muy poco, pero su afabilidad se contradice con la estrategia de acoso y derribo y destrucción del adversario político allí donde el PP quiere conseguir el poder. Se contradice una cosa con otra… Me desconcierta, no sé a qué atenerme, se ve una persona afable pero eso no coincide con su práctica política habitual.